Los aperitivos son el acompañamiento perfecto para cualquier cena improvisada. A veces nos encontramos sin tiempo suficiente para preparar una cena completa, pero eso no significa que nuestros invitados se queden sin nada que comer. Por eso, en este artículo vamos a proponer una serie de aperitivos fáciles y rápidos que podemos preparar en un abrir y cerrar de ojos.
Empezamos con una opción clásica, las aceitunas. Además de ser súper fáciles y rápidas de preparar, las aceitunas son deliciosas y nunca fallan. Podemos elegir diferentes variedades, tanto verdes como negras, y acompañarlas con un poco de pan. Si queremos darle un toque diferente, podemos mezclar las aceitunas con un poco de aceite de oliva, ajo picado y algunas hierbas aromáticas, como romero o tomillo. El resultado será un aperitivo con mucho sabor y muy original.
Otra opción fácil y rápida que podemos preparar son los dips o cremas para mojar. Podemos hacerlos de diferentes sabores, como hummus, guacamole o salsa de queso. Todo lo que necesitamos es un procesador de alimentos para mezclar los ingredientes y listo. Podemos acompañarlos con palitos de zanahoria, apio o pan tostado. Si queremos darle una presentación más original, podemos servir los dips en pequeñas tazas o vasitos individuales.
Si queremos algo un poco más sofisticado, podemos optar por unos mini-pimientos rellenos. Para prepararlos, solo necesitamos lavar los pimientos y cortar la parte superior para retirar las semillas. Después, los rellenamos con queso crema y los horneamos durante unos minutos. El resultado será unos aperitivos muy vistosos y sabrosos. Podemos elegir diferentes tipos de queso, como roquefort o gorgonzola, para darle un toque más intenso.
Otra opción muy fácil de preparar son las brochetas de mozzarella, tomate cherry y albahaca. Solo tenemos que cortar la mozzarella y los tomates en trozos pequeños, y alternarlos en brochetas junto con hojas de albahaca fresca. Si queremos aportar algo más de sabor, podemos añadir un poco de aceite de oliva y vinagre balsámico. El resultado será un aperitivo fresco y ligero, perfecto para el verano.
Por último, no podemos olvidarnos de los clásicos canapés. Si tenemos un poco más de tiempo, podemos preparar diferentes variedades con diferentes ingredientes. Podemos hacerlos de salmón ahumado con queso crema, de jamón serrano con huevo duro, o de paté con aceitunas. Todo dependerá de nuestro gusto y de los ingredientes que tengamos en la nevera. Los canapés son un aperitivo muy versátil y siempre quedan bien en cualquier cena.
En conclusión, estos son solo algunos ejemplos de aperitivos fáciles y rápidos que podemos preparar para una cena improvisada. Lo importante es usar nuestra creatividad y adaptarnos a los ingredientes que tengamos disponibles en ese momento. Con un poco de imaginación, podemos preparar unos aperitivos que sorprendan a nuestros invitados y hagan que nuestra cena sea todo un éxito.